La Revolución Agrícola 1650 - 1800
Durante el siglo XVIII, el paisaje cambió dramáticamente en varias partes de Europa, especialmente en Inglaterra, a medida que se introdujeron nuevos y más rentables métodos agrícolas.
Los métodos agrícolas europeos se mantuvieron sin cambios durante siglos. Sin embargo, en el siglo XVIII los terratenientes, botánicos y criadores de ganado, particularmente en Inglaterra, discutían sobre mejores formas de administrar las fincas y sembrar cultivos.
Las ciudades y las industrias estaban creciendo y se generaba más dinero de la agricultura. A medida que crecía la utilidad, los propietarios de la tierra estudiaban y experimentaban con más ahínco. Todo esto condujo a una revolución agrícola. Se diseñaron nuevos arados y, en 1701, el granjero inglés Jethro Tull inventó una máquina para sembrar semillas tirada por caballos, que permitía la siembra mecanizada de las semillas sobre los surcos para que dicho proceso fuera más fácil.
Mediante la rotación de los cultivos se incrementó la fertilidad del suelo y mediante el engorde cuidadoso se mejoraron los animales. Estos métodos requerían inversión financiera y granjas extensas. El paisaje campesino cambió enormemente durante el siglo XVIII. En varias partes de Inglaterra, la tierra había sido cultivada en campos abiertos que databan del medioevo. Los aldeanos tomaban en arriendo parcelas de estos campos sobre las cuales trabajaban con la ayuda de sus vecinos. Este sistema suministró suficiente comida para sostener a las gentes del campo, pero no producía un sobrante para exportar a las ciudades y obtener ganancias.
Las actas de encerramiento
Los terratenientes decidieron que sus campos podían ser más eficientemente cultivados si se cercaban. Se construyeron cercas y muros a través de los campos abiertos para crear unidades más pequeñas y fáciles de manejar. Las actas de encerramiento pasadas por el parlamento entre 1759 y 1801 significaron que el engorde de animales también habría de estar encerrado. En total, tres millones de hectáreas de tierras fueron cerradas en Inglaterra durante la revolución agrícola. Muchos arrendatarios perdieron sus sustentos y fueron obligados a trasladarse a las ciudades.
Los terratenientes ricos establecieron enormes estados con magníficas casas. Las fincas crecieron y algunos estados fueron rediseñados en zonas de conservación por jardineros de paisajes como Lancelot 'Capability' Brown. Estos cambios eran apoyados por el gobierno, el cual estaba conformado por terratenientes. Sin embargo, trajeron consigo mucha dificultad a los agricultores del común.
OTROS DATOS:
Esta caricatura antigua muestra a un granjero tratando de cargar todas las herramientas que necesitaba usar en las nuevas haciendas del siglo XVIII.
Thomas William Coke (1752-y 842), duque de Leicester, era un rico terrateniente y miembro del parlamento. Fue un famoso líder de la revolución agrícola.
Cada año, Thomas Coke dictaba una conferencia en su casa de campo, Holkham Hall, a la cual asistían muchos terratenientes y criadores de ganado de toda Europa para discutir métodos agrícolas. El mismo Coke creó nuevas razas mejoradas de ovejas.
En muchas aldeas, la gente más pobre era obligada a abandonar sus hogares para dar paso a espacio para los nuevos campos de cultivo y para los métodos agrícolas modernos
La Sociedad Agrícola Real Británica sostenía reuniones al aire libre cada año para exhibir animales con pedigrí y discutir asuntos agrícolas. Esta reunión, cerca de Bristol, se llevó a cabo a principios del siglo XIX.
La cría experimental de animales de granja produjo nuevas y mejoradas razas, tales como esta antigua raza de cerdo inglés.
Mediante la rotación de cultivos se incrementaba la fertilidad de la tierra, especialmente si se sembraban tréboles cada cuatro años, lo que brindaba a la tierra mayor fertilidad y la dejaba descansar. Esto mejoró los cultivos que se sembraban durante los otros tres años.
Los métodos agrícolas europeos se mantuvieron sin cambios durante siglos. Sin embargo, en el siglo XVIII los terratenientes, botánicos y criadores de ganado, particularmente en Inglaterra, discutían sobre mejores formas de administrar las fincas y sembrar cultivos.
Las ciudades y las industrias estaban creciendo y se generaba más dinero de la agricultura. A medida que crecía la utilidad, los propietarios de la tierra estudiaban y experimentaban con más ahínco. Todo esto condujo a una revolución agrícola. Se diseñaron nuevos arados y, en 1701, el granjero inglés Jethro Tull inventó una máquina para sembrar semillas tirada por caballos, que permitía la siembra mecanizada de las semillas sobre los surcos para que dicho proceso fuera más fácil.
Mediante la rotación de los cultivos se incrementó la fertilidad del suelo y mediante el engorde cuidadoso se mejoraron los animales. Estos métodos requerían inversión financiera y granjas extensas. El paisaje campesino cambió enormemente durante el siglo XVIII. En varias partes de Inglaterra, la tierra había sido cultivada en campos abiertos que databan del medioevo. Los aldeanos tomaban en arriendo parcelas de estos campos sobre las cuales trabajaban con la ayuda de sus vecinos. Este sistema suministró suficiente comida para sostener a las gentes del campo, pero no producía un sobrante para exportar a las ciudades y obtener ganancias.
Las actas de encerramiento
Los terratenientes decidieron que sus campos podían ser más eficientemente cultivados si se cercaban. Se construyeron cercas y muros a través de los campos abiertos para crear unidades más pequeñas y fáciles de manejar. Las actas de encerramiento pasadas por el parlamento entre 1759 y 1801 significaron que el engorde de animales también habría de estar encerrado. En total, tres millones de hectáreas de tierras fueron cerradas en Inglaterra durante la revolución agrícola. Muchos arrendatarios perdieron sus sustentos y fueron obligados a trasladarse a las ciudades.
Los terratenientes ricos establecieron enormes estados con magníficas casas. Las fincas crecieron y algunos estados fueron rediseñados en zonas de conservación por jardineros de paisajes como Lancelot 'Capability' Brown. Estos cambios eran apoyados por el gobierno, el cual estaba conformado por terratenientes. Sin embargo, trajeron consigo mucha dificultad a los agricultores del común.
OTROS DATOS:
Esta caricatura antigua muestra a un granjero tratando de cargar todas las herramientas que necesitaba usar en las nuevas haciendas del siglo XVIII.
Thomas William Coke (1752-y 842), duque de Leicester, era un rico terrateniente y miembro del parlamento. Fue un famoso líder de la revolución agrícola.
Cada año, Thomas Coke dictaba una conferencia en su casa de campo, Holkham Hall, a la cual asistían muchos terratenientes y criadores de ganado de toda Europa para discutir métodos agrícolas. El mismo Coke creó nuevas razas mejoradas de ovejas.
En muchas aldeas, la gente más pobre era obligada a abandonar sus hogares para dar paso a espacio para los nuevos campos de cultivo y para los métodos agrícolas modernos
La Sociedad Agrícola Real Británica sostenía reuniones al aire libre cada año para exhibir animales con pedigrí y discutir asuntos agrícolas. Esta reunión, cerca de Bristol, se llevó a cabo a principios del siglo XIX.
La cría experimental de animales de granja produjo nuevas y mejoradas razas, tales como esta antigua raza de cerdo inglés.
Mediante la rotación de cultivos se incrementaba la fertilidad de la tierra, especialmente si se sembraban tréboles cada cuatro años, lo que brindaba a la tierra mayor fertilidad y la dejaba descansar. Esto mejoró los cultivos que se sembraban durante los otros tres años.