Los británicos en India 1774 - 1858
El control de la india por parte de la compañía británica de las Indias orientales gradualmente tomó fuerza. Los británicos se volvieron la fuerza dominante de la sociedad india y se convirtieron en su casta gobernante.
En 1750, la compañía británica de las Indias orientales controlaba el rentable mercado entre Gran Bretaña, India y el Lejano Oriente. Sus oficiales eran hombres de negocios bien entrenados que habían foijado un conocimiento de los asuntos indios, especialmente a través de los indios que empleaban. Se hicieron amigos de muchos príncipes indios y aprovecharon gangas tanto con los amigos como con los enemigos de los gobernantes mogoles. Muchos ciudadanos británicos en India vivían como príncipes. Gracias al trabajo en la compañía británica de las Indias orientales, muchos de ellos se volvieron extremadamente ricos. Algunos de los llamados nabobs construyeron grandes casas en Calcuta y en otros lugares, diseñadas por arquitectos británicos, provistas de costosos lujos provenientes de Inglaterra, India y las colonias. En Calcuta, sostenían reuniones y tertulias para tomar el té y bailar, como si estuvieran en casa. Gradualmente, las esposas y las familias viajaban a la India para compartir esta forma de vida inglesa. No obstante, algunos británicos se sentían atraídos hacia el arte, la cultura y la arquitectura indios y preferían usar ropas indias, por lo menos en casa. Aprendieron los idiomas indios y estudiaron las religiones y la literatura hindúes; además, llevaron las ideas indias a Gran Bretaña cuando regresaron.
La expansión británica
En 1780, la compañía de las Indias orientales controlaba muchas de las más prósperas partes de India, pero en 1784 el gobierno británico detuvo dicha expansión. Los jefes de la compañía pensaban lo contrario. Cuando los estados indios luchaban entre sí, la compañía simplemente se trasladaba a esa zona.
Alrededor del año 1800, la ambición de Napoleón de construir un imperio en India atemorizó a los británicos y el gobierno cambió su política. De 1803 a 1815, la compañía luchó contra los Maratha, que gobernaban la parte central de la India, y dividió su poder. En muchos casos, adoptaron un enfoque suave utilizando el comercio para favorecer a ciertos estados indios y para estacionar tropas allí para su protección'.
La compañía luchó en Burma, donde los gobernantes locales amenazaron a Bengala, así como en la frontera noroccidental y en Afganistán, donde se le temía a la influencia rusa. Entre 1843 y 1849, anexaron Sind y Punjab. Siempre que una dinastía fracasaba, o que un estado era gobernado de manera débil, la compañía se trasladaba allí. Durante la década de 1830, el gobernador de la compañía pomposamente anuló varias de las tradiciones indias e introdujo a los misioneros para convertir a los indios al cristianismo. La compañía construía caminos, vías férreas y edificaciones, y expandió los negocios británicos insistiendo en que se usara el inglés como el idioma de la educación y los negocios. Como resultado, la oposición de los indios se incrementó.
El amotinamiento de los indios
Los problemas comenzaron entre los sepoy, los soldados indios dentro del ejército británico. Incitados por terribles hambrunas, el amotinamiento indio comenzó en 1857. Varias ciudades, incluida la capital, Delhi, fueron capturadas por los sepoy, y los hombres, mujeres y niños británicos fueron masacrados. El amotinamiento fue controlado de manera violenta por las tropas británicas. De ahí en adelante, cada una de las partes se tomó sospechosa de la otra. Los británicos comenzaron a vivir una vida más aislada y los indios fueron mantenidos en su sitio'. El gobierno británico tomó control de la compañía de las Indias orientales en 1858 y la cerró. Mientras que India era tal vez la colonia europea más rica y desarrollada de todas, los británicos tuvieron que trabajar muy duro para controlarla.
El hogar de los Nabobs
Los nabobs eran oficiales de la compañía de las Indias orientales que habían ganado fortunas en la India. Muchos nabobs habían crecido en condiciones adversas y se habían ¡do a la India para escapar de las épocas difíciles y para buscar fortuna o construir una nueva vida. Trabajaban duro, arriesgando sus vidas en las guerras o ante la enfermedad. Vivían en condiciones que reflejaban la opulencia de los gobernantes indios, combinadas con los enseres de los aristócratas británicos.
Construyeron grandes mansiones en Calcuta y Delhi, y tenían muchos sirvientes.
OTROS DATOS:
Este modelo a escala, llamado el tigre de Tipu, muestra a un tigre devorando a un europeo. Fue fabricado para Tipu Sahib, de Mysore. Entre 1767 y 1799, con el apoyo francés, trato de resistirse al control de los británicos.
Tipu Sahib (1749-1799), de Mysore, era propietario de un juego de ajedrez en marfil que estaba conformado por piezas de principes y hombres indios en un lado, y por administradores de la compañía de las Indias orientales y soldados en el otro.
Al principio, los británicos se mezclaban con mayor facilidad con los indios. En la imagen, el gobernador escocés Sir David Ochterlony fuma su pipa y preside una presentación musical india.
En 1805, los británicos controlaban los ricos distritos fabricantes de Bengala, en el nororiente de la India, así como las prósperas tierras costeras del sur.
Algunos de los rajás indios se hicieron amigos de los británicos y así obtuvieron muchas ventajas. Ser protegido por los soldados británicos garantizaba el poder a un príncipe, y los británicos se beneficiaban del acuerdo debido a que así obtenían fácil influencia y capacidad de comerciar en el estado de dicho príncipe, sin necesidad de gobernar.
En 1750, la compañía británica de las Indias orientales controlaba el rentable mercado entre Gran Bretaña, India y el Lejano Oriente. Sus oficiales eran hombres de negocios bien entrenados que habían foijado un conocimiento de los asuntos indios, especialmente a través de los indios que empleaban. Se hicieron amigos de muchos príncipes indios y aprovecharon gangas tanto con los amigos como con los enemigos de los gobernantes mogoles. Muchos ciudadanos británicos en India vivían como príncipes. Gracias al trabajo en la compañía británica de las Indias orientales, muchos de ellos se volvieron extremadamente ricos. Algunos de los llamados nabobs construyeron grandes casas en Calcuta y en otros lugares, diseñadas por arquitectos británicos, provistas de costosos lujos provenientes de Inglaterra, India y las colonias. En Calcuta, sostenían reuniones y tertulias para tomar el té y bailar, como si estuvieran en casa. Gradualmente, las esposas y las familias viajaban a la India para compartir esta forma de vida inglesa. No obstante, algunos británicos se sentían atraídos hacia el arte, la cultura y la arquitectura indios y preferían usar ropas indias, por lo menos en casa. Aprendieron los idiomas indios y estudiaron las religiones y la literatura hindúes; además, llevaron las ideas indias a Gran Bretaña cuando regresaron.
La expansión británica
En 1780, la compañía de las Indias orientales controlaba muchas de las más prósperas partes de India, pero en 1784 el gobierno británico detuvo dicha expansión. Los jefes de la compañía pensaban lo contrario. Cuando los estados indios luchaban entre sí, la compañía simplemente se trasladaba a esa zona.
Alrededor del año 1800, la ambición de Napoleón de construir un imperio en India atemorizó a los británicos y el gobierno cambió su política. De 1803 a 1815, la compañía luchó contra los Maratha, que gobernaban la parte central de la India, y dividió su poder. En muchos casos, adoptaron un enfoque suave utilizando el comercio para favorecer a ciertos estados indios y para estacionar tropas allí para su protección'.
La compañía luchó en Burma, donde los gobernantes locales amenazaron a Bengala, así como en la frontera noroccidental y en Afganistán, donde se le temía a la influencia rusa. Entre 1843 y 1849, anexaron Sind y Punjab. Siempre que una dinastía fracasaba, o que un estado era gobernado de manera débil, la compañía se trasladaba allí. Durante la década de 1830, el gobernador de la compañía pomposamente anuló varias de las tradiciones indias e introdujo a los misioneros para convertir a los indios al cristianismo. La compañía construía caminos, vías férreas y edificaciones, y expandió los negocios británicos insistiendo en que se usara el inglés como el idioma de la educación y los negocios. Como resultado, la oposición de los indios se incrementó.
El amotinamiento de los indios
Los problemas comenzaron entre los sepoy, los soldados indios dentro del ejército británico. Incitados por terribles hambrunas, el amotinamiento indio comenzó en 1857. Varias ciudades, incluida la capital, Delhi, fueron capturadas por los sepoy, y los hombres, mujeres y niños británicos fueron masacrados. El amotinamiento fue controlado de manera violenta por las tropas británicas. De ahí en adelante, cada una de las partes se tomó sospechosa de la otra. Los británicos comenzaron a vivir una vida más aislada y los indios fueron mantenidos en su sitio'. El gobierno británico tomó control de la compañía de las Indias orientales en 1858 y la cerró. Mientras que India era tal vez la colonia europea más rica y desarrollada de todas, los británicos tuvieron que trabajar muy duro para controlarla.
El hogar de los Nabobs
Los nabobs eran oficiales de la compañía de las Indias orientales que habían ganado fortunas en la India. Muchos nabobs habían crecido en condiciones adversas y se habían ¡do a la India para escapar de las épocas difíciles y para buscar fortuna o construir una nueva vida. Trabajaban duro, arriesgando sus vidas en las guerras o ante la enfermedad. Vivían en condiciones que reflejaban la opulencia de los gobernantes indios, combinadas con los enseres de los aristócratas británicos.
Construyeron grandes mansiones en Calcuta y Delhi, y tenían muchos sirvientes.
OTROS DATOS:
Este modelo a escala, llamado el tigre de Tipu, muestra a un tigre devorando a un europeo. Fue fabricado para Tipu Sahib, de Mysore. Entre 1767 y 1799, con el apoyo francés, trato de resistirse al control de los británicos.
Tipu Sahib (1749-1799), de Mysore, era propietario de un juego de ajedrez en marfil que estaba conformado por piezas de principes y hombres indios en un lado, y por administradores de la compañía de las Indias orientales y soldados en el otro.
Al principio, los británicos se mezclaban con mayor facilidad con los indios. En la imagen, el gobernador escocés Sir David Ochterlony fuma su pipa y preside una presentación musical india.
En 1805, los británicos controlaban los ricos distritos fabricantes de Bengala, en el nororiente de la India, así como las prósperas tierras costeras del sur.
Algunos de los rajás indios se hicieron amigos de los británicos y así obtuvieron muchas ventajas. Ser protegido por los soldados británicos garantizaba el poder a un príncipe, y los británicos se beneficiaban del acuerdo debido a que así obtenían fácil influencia y capacidad de comerciar en el estado de dicho príncipe, sin necesidad de gobernar.