Las cruzadas 1095 - 1291
Palestina, que alguna vez gobernada por Bizancio, había sido conquistada por los árabes musulmanes en el años 637. Desde Roma, el Papa llamó a los líderes cristianos para luchar por la tierra santa.
Para los cristianos musulmanes, Palestina era la Tierra Santa. Después de que los árabes conquistaron Palestina, en 637, los peregrinos cristianos aún tenían la posibilidad de visitar Jerusalén de manera segura, pero esta situación cambió con la llegada de los turcos de Seljuk.
En el año 1095, el Papa Urbano II hizo un llamado a los cristianos para liberar Palestina de la dominación musulmana. Tanto caballeros como gente del común se aventuraron, liderados por Pedro el Ermitaño y Walter el Pobre (Walter de Penniless). La mayoría de ellos jamás llegó a Palestina, y el resto se convirtió en una turba salvaje y hambrienta.
En el año 1099, un ejército disciplinado de cruzados recapturó Jerusalén, masacrando a sus habitantes. Establecieron cuatro reinos de cruzados en Palestina y Siria. Al principio, los sarracenos, como los cruzados llamaban a los turcos de Seljuk, dejaron de importunar los reinos de los cruzados. Sin embargo, algunos de los cruzados se comportaron mal con los musulmanes.
En 1187, el sultán musulmán Saladino derrotó a los cruzados y retornó a Jerusalén. En el año 1191, Ricardo I de Inlglaterra, conocido como Corazón de León, lideró un ejército hasta la tierra santa. Se tomó Chipre y la ciudad de Acre, pero no puedo recuperar Jerusalén.
Saladino respetaba a Ricardo y finalmente ambos firmaron un tratado en el que compartían la Tierra Santa, incluyendo a Jerusalén. Los cruzados fundaron un segundo reino en la ciudad santa, cuyo núcleo estaba en Acre.
La cuarta cruzada comenzó en 1202, pero los cruzados no pudieron pagar por el transporte. A cambio del transporte desde Italia, acordaron saquear Constantinopla.
En el año 1212, cerca de 50000 niños de Francia y Alemania salieron hacia Palestina, pero la mayoría de ellos murió de hambre o se convirtió en esclavos. Esto se conoce como la cruzada de los niños.
La quinta cruzada a Egipto falló, y las últimas tres cruzadas (1218-1272) tampoco tuvieron éxito. Palestina fue finalmente conquistada en 1291 por el sultán de Egipto.
OTROS DATOS:
Ricardo Corazón de León (1157-1199) lideró un ejército de caballeros hasta Tierra Santa en el año 1191, durante la tercera cruzada. No pudieron recapturar Jerusalén, pero Ricardo aseguró la paz durante cinco años mediante un tratado con Saladino. Esto permitió a los peregrinos europeos visitar de nuevo los lugares sagrados. Cuando Ricardo trató de retornar a Inglaterra, en el año 1192, fue capturado por Leopoldo de Austria, y luego por Enrique VI, el santo emperador romano que secuestró a Ricardo durante casi un año. Finalmente llegó a Inglaterra, en el año 1194.
Los cruzados vestían pesadas armaduras y montaban grandes caballos; mientras que los musulmanes, llamados sarracenos, vestían armaduras livianas y cabalgaban mulas. Como resultado, los cruzados se veían formidables, pero los sarracenos tenían mayor movilidad.
Al principio, los cruzados viajaban por tierra desde Francia e Italia hasta Palestina; sin embargo, después de tener que luchar contra los turcos de Seljuk en Anatolia, viajaron por mar desde Venecia.
Los cruzados construyeron castillos con estilo normando en Palestina y Siria. Krak des Chevaliers, en Siria, fue construido por los caballeros cruzados y albergaba a 2000 hombres; fue sitiado por los musulmanes en el año 1271. Esto casi causó la muerte de los cruzados por inanición, pero los musulmanes los forzaron a rendirse.
Saladino (1137-1193), un líder devoto, unificó su pueblo y lo condujo a un Yihad, o guerra santa, contra los cruzados.
Luis IX, rey de Francia (1226-1270), era un hombre profundamente religioso. Él lideró la séptima cruzada contra Egipto, en el año 1248, y dirigió la octava cruzada (1270), pero murió contagiado por la plaga.
En la decisiva batalla de Hattin, en 1187, Saladino engañó a los cruzados en una colina durante un día caluroso. Mientras los cruzados se "asaban" dentro de sus armaduras de metal, él los rodeó y los hizo rendirse. Posteriormente, Saladino partió hacia Jerusalén para recuperarla.
Para los cristianos musulmanes, Palestina era la Tierra Santa. Después de que los árabes conquistaron Palestina, en 637, los peregrinos cristianos aún tenían la posibilidad de visitar Jerusalén de manera segura, pero esta situación cambió con la llegada de los turcos de Seljuk.
En el año 1095, el Papa Urbano II hizo un llamado a los cristianos para liberar Palestina de la dominación musulmana. Tanto caballeros como gente del común se aventuraron, liderados por Pedro el Ermitaño y Walter el Pobre (Walter de Penniless). La mayoría de ellos jamás llegó a Palestina, y el resto se convirtió en una turba salvaje y hambrienta.
En el año 1099, un ejército disciplinado de cruzados recapturó Jerusalén, masacrando a sus habitantes. Establecieron cuatro reinos de cruzados en Palestina y Siria. Al principio, los sarracenos, como los cruzados llamaban a los turcos de Seljuk, dejaron de importunar los reinos de los cruzados. Sin embargo, algunos de los cruzados se comportaron mal con los musulmanes.
En 1187, el sultán musulmán Saladino derrotó a los cruzados y retornó a Jerusalén. En el año 1191, Ricardo I de Inlglaterra, conocido como Corazón de León, lideró un ejército hasta la tierra santa. Se tomó Chipre y la ciudad de Acre, pero no puedo recuperar Jerusalén.
Saladino respetaba a Ricardo y finalmente ambos firmaron un tratado en el que compartían la Tierra Santa, incluyendo a Jerusalén. Los cruzados fundaron un segundo reino en la ciudad santa, cuyo núcleo estaba en Acre.
La cuarta cruzada comenzó en 1202, pero los cruzados no pudieron pagar por el transporte. A cambio del transporte desde Italia, acordaron saquear Constantinopla.
En el año 1212, cerca de 50000 niños de Francia y Alemania salieron hacia Palestina, pero la mayoría de ellos murió de hambre o se convirtió en esclavos. Esto se conoce como la cruzada de los niños.
La quinta cruzada a Egipto falló, y las últimas tres cruzadas (1218-1272) tampoco tuvieron éxito. Palestina fue finalmente conquistada en 1291 por el sultán de Egipto.
OTROS DATOS:
Ricardo Corazón de León (1157-1199) lideró un ejército de caballeros hasta Tierra Santa en el año 1191, durante la tercera cruzada. No pudieron recapturar Jerusalén, pero Ricardo aseguró la paz durante cinco años mediante un tratado con Saladino. Esto permitió a los peregrinos europeos visitar de nuevo los lugares sagrados. Cuando Ricardo trató de retornar a Inglaterra, en el año 1192, fue capturado por Leopoldo de Austria, y luego por Enrique VI, el santo emperador romano que secuestró a Ricardo durante casi un año. Finalmente llegó a Inglaterra, en el año 1194.
Los cruzados vestían pesadas armaduras y montaban grandes caballos; mientras que los musulmanes, llamados sarracenos, vestían armaduras livianas y cabalgaban mulas. Como resultado, los cruzados se veían formidables, pero los sarracenos tenían mayor movilidad.
Al principio, los cruzados viajaban por tierra desde Francia e Italia hasta Palestina; sin embargo, después de tener que luchar contra los turcos de Seljuk en Anatolia, viajaron por mar desde Venecia.
Los cruzados construyeron castillos con estilo normando en Palestina y Siria. Krak des Chevaliers, en Siria, fue construido por los caballeros cruzados y albergaba a 2000 hombres; fue sitiado por los musulmanes en el año 1271. Esto casi causó la muerte de los cruzados por inanición, pero los musulmanes los forzaron a rendirse.
Saladino (1137-1193), un líder devoto, unificó su pueblo y lo condujo a un Yihad, o guerra santa, contra los cruzados.
Luis IX, rey de Francia (1226-1270), era un hombre profundamente religioso. Él lideró la séptima cruzada contra Egipto, en el año 1248, y dirigió la octava cruzada (1270), pero murió contagiado por la plaga.
En la decisiva batalla de Hattin, en 1187, Saladino engañó a los cruzados en una colina durante un día caluroso. Mientras los cruzados se "asaban" dentro de sus armaduras de metal, él los rodeó y los hizo rendirse. Posteriormente, Saladino partió hacia Jerusalén para recuperarla.
